No iré a la marcha contra la TV basura
Uno de mis motivos es que nadie sabe que existe la CONCORTV.
[...]Los televidentes se acostumbran a la cochinada químicamente pura y a la vulgaridad más atroz. Embarrarse es para ellos una fiesta y enlodarse una diversión y enmierdarse una vocación y un destino.[...]
Este extracto lo saqué de la versión impresa del tópico que habló Marco Aurelio Denegri en La Función de la Palabra con respecto a la programación de la televisión de señal abierta (y recientemente, de paga).
A decir verdad, la TV basura es precisamente el tema que muy pocas (por no decir casi nulas) veces los peruanos tocamos, porque desgraciadamente convivimos con el bombardeo de los culebrones faranduleros (sí, ése de las escaramuzas de unos cuántos personajes que precisamente trabajan en un set televisivo y/o simplemente dejan que los programas de farándula exploten sus miserias personales con fines de lucro). No obstante, el chiste está en que -como televidentes- somos patéticos a la hora de mostrar nuestra disconformidad que hasta hacemos berrinche y medio por un programa de cultura y maldiciendo a los de "Telebasura", cuando en realidad, ya nos hemos acostumbrado a ella que la analogía de Marco Aurelio Denegri resulta más que acertada.
No obstante, en vez de que la gente vaya a averiguar si existe una forma en la cual se llegue a tener un contacto con una entidad en la que permita hacer llegar las quejas hacia las casas televisoras, se ponen a desahogarse de forma colectiva como si sus razones fuesen igual de relevantes como la oposición de la ya derogada Ley Laboral Juvenil. El problema no es sóla y únicamente el televidente, sino también cómo se hace la logística para calcular el alcance que tiene determinado programa a nivel de las personas (muchos creen que el índice rating o la sintonía garantiza el éxito de un programa, pero el problema es que IBOPE Media -entidad que hace dicha logística- sólo se enfoca en cronometrizar el tiempo en el cual permanece un televisor en un determinado canal), y encima, el meollo del asunto está en que HASTA AHORA LA TELEVISIÓN DIGITAL TERRESTRE ESTÁ EN LA MISMA SITUACIÓN QUE EL UHF EN LOS 90's.
Y por si ésto no fuera poco, el escenario que se nos presenta es bastante similar a la atmósfera hostil que sufre el semanario Charlie Hebdo con respecto a las parodias que le hacen, si tomamos los ejemplos locales de La Paisna Jacinta y el Comitée de la Eliminación de Discriminación Racial, o la cancelación del programa humorístico del cómico Carlos Álvarez en ATV por un incidente que estaba relacionado con una cadena de comida rápida combinada con una sátira política.
Irónicamente, nadie (o casi nadie) sabe que existe el Consejo Consultivo de Radio y Televisión (o CONCORTV como mencioné desde un inicio), el cual es un medio que permite hacer lo que pretenden intentar los participantes de dicha marcha contra la TV Basura. Muchos piden una intervención a nivel estatal, pero nadie se le ocurrió recordar que Juan Velasco Alvarado hizo esa payasada, ocasionando una concentración de medios que precisamente perjudicó la libertad de opinión y que Ricardo Bellmont iba a mandar su paquetazo, teniendo la concha de hacer en sus primeras emisiones de "La Noche del 11" las mismas mañoserías que Álamo Pérez Luna.
Y por si fuera poco, otra razón por la cual no iré a la marcha ésa es porque precisamente está siendo politizada de una forma que salió una página que le hace la contra a dicha marcha.
Al fin de al cabo, ¿dónde están de las marchas de la CGTP y SUTEP cuando se las necesita? Ah, esperen, el SUTEP ya está haciendo marchas en Arequipa, pero la división juvenil de la CGTP no actualiza su fanpage desde que participaron en la marcha anti #LeyPulpín desde el 28 de enero.